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Plasma rico en plaquetas (PRP)

¿Qué es el plasma rico en plaquetas?

El plasma rico en plaquetas (PRP) es un tratamiento avanzado de medicina regenerativa que utiliza los propios componentes sanguíneos del paciente para estimular la reparación y rejuvenecimiento de tejidos.

Este procedimiento implica la extracción de una pequeña cantidad de sangre, que se centrifuga para separar el plasma, rico en plaquetas y factores de crecimiento esenciales.

Al inyectar este concentrado de PRP en las áreas específicas del rostro o cuerpo, se promueve la regeneración celular, mejora la textura y tono de la piel, reduce arrugas y cicatrices, y acelera la cicatrización. El PRP es ampliamente utilizado por sus propiedades naturales y mínimamente invasivas, ofreciendo resultados efectivos y duraderos sin el riesgo de reacciones alérgicas o rechazos.

Beneficios del plasma rico en plaquetas

Estimulación de la regeneración celular: Promueve la producción de nuevas células y la regeneración de tejidos.

Mejora de la textura y tono de la piel: Ayuda a suavizar la piel, reducir arrugas y líneas finas, y mejorar el tono y la luminosidad.

Reducción de cicatrices: Eficaz en la mejora de cicatrices de acné, quirúrgicas y otras imperfecciones.

Aceleración de la cicatrización: Favorece la rápida cicatrización de heridas y lesiones.

Producción de colágeno: Estimula la producción de colágeno, mejorando la firmeza y elasticidad de la piel.

Reducción de la inflamación: Ayuda a disminuir la inflamación y promover una recuperación más rápida de la piel.

Resultados naturales y duraderos: Ofrece mejoras visibles y sostenibles sin la necesidad de productos sintéticos o químicos.

Bajo riesgo de reacciones adversas: Al utilizar componentes del propio cuerpo del paciente, se minimiza el riesgo de reacciones alérgicas o rechazos.

Versatilidad: Puede ser utilizado en diversas áreas del cuerpo, incluyendo rostro, cuello, manos y cuero cabelludo.

Procedimiento mínimamente invasivo: No requiere cirugía ni tiempo de inactividad significativo, permitiendo a los pacientes retomar sus actividades diarias rápidamente.

¿Cómo se realiza el procedimiento con el plasma rico en plaquetas?

En Cliniq, el procedimiento con plasma rico en plaquetas (PRP) comienza con la extracción de una pequeña cantidad de sangre del paciente. Esta sangre se coloca en una centrifugadora que separa el plasma rico en plaquetas de los demás componentes sanguíneos.

Una vez obtenido el PRP, se limpia y desinfecta la zona a tratar para inyectar el PRP cuidadosamente en las áreas específicas del rostro o cuerpo utilizando agujas finas.

Este proceso estimula la regeneración celular y la producción de colágeno. La sesión dura aproximadamente 45 a 60 minutos, y el paciente puede retomar sus actividades diarias de inmediato, siguiendo las recomendaciones postratamiento proporcionadas por el especialista para maximizar los resultados.

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En el procedimiento de tratamiento con plasma rico en plaquetas (PRP), se puede utilizar una crema anestésica tópica para asegurar el confort del paciente. Esta crema se aplica en las áreas a tratar aproximadamente 20 a 30 minutos antes de las inyecciones para adormecer la piel y minimizar cualquier molestia durante el procedimiento. Debido a la naturaleza mínimamente invasiva del tratamiento y el uso de agujas finas, la crema anestésica tópica suele ser suficiente para proporcionar una experiencia cómoda para el paciente.

La recuperación del procedimiento con plasma rico en plaquetas (PRP) es rápida y sencilla. Inmediatamente después del tratamiento, es común experimentar un leve enrojecimiento, inflamación o pequeños hematomas en las áreas inyectadas, que suelen desaparecer rápidamente.

Se recomienda evitar la exposición directa al sol, el uso de maquillaje y productos irritantes en la piel durante las primeras 24 horas. También es aconsejable no realizar ejercicio físico intenso durante este tiempo. Los pacientes pueden retomar sus actividades diarias casi de inmediato, y la piel comenzará a mostrar mejoras visibles en las semanas siguientes, con resultados que continúan mejorando a medida que el colágeno se regenera y la piel se revitaliza.

El procedimiento plasma rico en plaquetas (PRP) genera una incapacidad mínima, permitiendo a los pacientes retomar sus actividades diarias casi de inmediato. Los efectos secundarios son leves y temporales, como un leve enrojecimiento, inflamación o pequeños hematomas en las áreas tratadas, que suelen desaparecer rápidamente. Durante este breve periodo de recuperación, se recomienda evitar la exposición directa al sol, el uso de maquillaje y productos irritantes, así como la realización de ejercicio físico intenso durante las primeras 24 horas. En general, la incapacidad es muy baja, lo que hace de este procedimiento una opción conveniente y eficaz para quienes buscan mejorar la apariencia de su piel sin interrupciones significativas en su rutina diaria.

Las indicaciones postratamiento tras un procedimiento de plasma rico en plaquetas (PRP) son esenciales para asegurar una recuperación adecuada y maximizar los resultados

  1. Evitar la exposición al sol: Proteger la piel de la exposición directa al sol durante al menos 24 horas y usar un protector solar de amplio espectro si es necesario salir al exterior.
  1. No usar productos irritantes: Abstenerse de aplicar maquillaje y productos que contengan retinoides, ácidos exfoliantes u otros ingredientes potencialmente irritantes durante al menos 24 horas.
  2. Hidratación: Mantener la piel bien hidratada utilizando cremas o lociones recomendadas por el especialista.
  3. Evitar el ejercicio intenso: No realizar actividades físicas vigorosas que puedan causar sudoración excesiva durante las primeras 24 horas.
  4. No tocar ni rascar: Evitar tocar, rascar o frotar las áreas tratadas para prevenir infecciones y asegurar una correcta cicatrización.
  5. Aplicación de frío si es necesario: Utilizar compresas frías para reducir el enrojecimiento o la hinchazón si es necesario.
  6. Seguir las indicaciones médicas: Cumplir con todas las instrucciones específicas proporcionadas por el especialista y asistir a cualquier cita de seguimiento programada.
  7. Observar la evolución: Estar atento a cualquier reacción inusual y contactar al médico si se experimentan efectos secundarios inesperados o preocupantes.

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